Bernarda Alba obliga a sus hijas a estar encerradas en casa a partir de la muerte de su padre y vestir siempre de negro para guardar el luto. Las hijas son jóvenes y quieren salir para buscar novio, pero Bernarda no las deja y por eso se luchan siempre. Al final, una de las hijas que estaba enamorada de un chico, se suicida.