La concreción de su materialidad es a través de la madera como alegoría a la naturaleza, y el color como expresión sensorial. Además propone una experiencia de compra innovadora, ya que el usuario customiza la silla pudiendo elegir el tipo de madera , el color del marco, y el color de los eslásticos. Esta capacidad de personalización es resultado de una analogía con la generación de disfraces propios para los carnavales.